Denuncian robo de opioides en hospital Dubarry, Dirección encubre y sospechan mafia de medicamentos
Médicos del hospital Blas Dubarry de la ciudad bonaerense de Mercedes, denunciaron el robo de medicamentos, incluyendo opioides, pero la dirección del hospital decidió ignorar los reportes.
Según pudo averiguar este blog, fueron varios los miembros del personal que, indignados por la decadencia que sufre el nosocomio, decidieron reportar el robo de medicamentos especialmente controlados, como morfina o fentanilo.
Tanto médicos como enfermeros lograron identificar al técnico de enfermería Jorge Marquestau como uno de los responsables del robo de medicamentos, reportandolo a la Dirección del hospital.
Según fuentes del nosocomio, Marquestau sufre de adicciones, y no es el único caso de personal de salud que consume fuera y dentro del hospital, disminuyendo la calidad del servicio al punto de convertir la institución en un paraíso para toda clase de delincuentes.
Sin embargo, lo que causa más indignación son las sospechas de participación de los jerarcas que insisten en proteger al enfermero a pesar de las denuncias, como si ellos mismos lo utilizaran para un trabajo sucio.
La actitud de los directores del hospital es especialmente sospechosa por antecedentes similares, como el del personal Ignacio Colombo, quien tras ser descubierto también robando medicamentos, fue reincorporado con un ascenso.
Es sabido entre el personal de salud que para lograr ascensos con la actual gestión, es necesario delinquir, militar políticamente o participar de alguna irregularidad, mientras que el personal honesto y de vocación pierde cada vez más terreno.
Un empleado de salud consultado por este blog expresó la frustración por el repudio generalizado de los mercedinos contra el hospital: “Sabemos que no funciona bien y que pasan cosas, pero no somos todos iguales, algunos intentamos hacer las cosas bien pero somos ignorados”.
Desde el año 2020, el hospital Dubarry que de por si era mediocre por estar sujeto al gobernador o intendente de turno, cayó en declive luego de que La Cámpora tomara el control, designando directores en base a su militancia política y dando lugar a una ola interna de delincuencia sin precedentes.
Entre los delitos que se cometen en el hospital, además del robo de medicamentos, hubo robos a pacientes que llegaron en estado de inconsciencia, venta de cocaína por parte de miembros del personal, mala praxis y encubrimiento sistemático de mala praxis, irregularidades en compras de insumos, etc.