Recientemente los bloques de Unión por la Patria y La Libertad Avanza en la ciudad bonaerense de Mercedes se mostraron enfrentados como nunca por sus diferentes opiniones respecto a un homicidio que no tiene nada que ver con la ciudad de Mercedes.
Concretamente, se insultaron y gritaron para la tribuna, unos argumentando que un femicidio es igual a un homicidio y otros negándolo, una discusión tan clásica como irrelevante en el Concejo Deliberante.
Informe de cuyos testigos o denunciantes, o al menos una, la concejal de JxC Deroba Lacasa, se retractó con inmediatez a través de un medio ultra K a pesar de las evidencias a la vez que despegó a los colegas de su bloque de la denuncia, como si estos se la hubieran reprochado (¿Habrán votado el proyecto?).
Es de manual: Insultos, gritos y descargos de argumentos clásicos sobre feminismo vs lógica para distraer a los ciudadanos afines a cada bando mientras los delitos de corrupción que realmente perjudican a los mercedinos siguen desapercibidos para la justicia. Muchos mercedinos hoy en vez de preguntarse por qué las obras no están finalizadas, que paso con el millón de dólares del BID, la obra de Acceso Sur, las pavimentaciones sin obras cloacales y demás asuntos locales, están alineándose detrás de sus concejales en apoyo a sus argumentos. De esta forma no solo se tapa la corrupción a la vez que se finge un conflicto, también se incrementa la tropa militante.